No eres el centro del universo, es verdad, pero eres especial, eres único, irrepetible.
Cada vez que te mimas, el universo se alegra; y cada vez que te agredes o maltratas, la existencia pierde su rumbo porque eres parte de una totalidad que te incluye.
Llámalo, Dios, Cosmos, Naturaleza o como sea, no estás solo.
Quererte a ti mismo es el principal requisito para la supervivencia emocional y psicológica.
Yo se que a veces te dan "mini odios" personales, que te miras al espejo y te criticas de manera inclemente (poro a poro) o que no te aguantas, pero es lo que tienes: tú mismo al desnudo, con lo bueno y lo malo a cuestas, con toda tu humanidad desbordante.
La vida no quiere que te arrastres, ni que te humilles ni que te laceres: te quiere digno.
Autoestima es autogobierno, es adornar la identidad, abrazar el yo sin caer en el ego.
He ahí la clave del bienestar: gestionarse a uno mismo de la mejor manera posible.